En un momento tan especial como el embarazo, el cuidado de la futura madre y el bienestar del bebé son nuestra máxima prioridad. En Beldon Beauty, contamos con tratamientos de belleza aptos para embarazadas, que brindan un enfoque seguro y experto para realzar tu bienestar durante esta etapa única. Comprendemos las necesidades específicas de las futuras mamás y ajustamos nuestros tratamientos en consecuencia.
En nuestra carta de protocolos contamos con un tratamiento facial y un masaje corporal, ambos específicamente diseñados para embarazadas. El tratamiento facial está pensado para adaptarse a los cambios de la piel durante el embarazo, proporcionando hidratación y los cuidados específicos para cada caso. Por otro lado, el masaje corporal se centra en aliviar las tensiones y mejorar la circulación, así como la retención de líquidos ofreciendo un momento de relajación profunda. Ambos protocolos son acompañados de asesoramiento personalizado de rutinas de cuidado en casa diseñadas para embarazadas. Además, hemos pensado en tu comodidad con cojines hechos específicamente para permitirte disfrutar de masajes cómodos y relajantes, incluso tumbada boca abajo. Confía en nosotros para proporcionarte pautas especializadas que atiendan a tus necesidades individuales mientras cuidamos de ti y de tu bebé en este viaje de salud compartida.
Se recomienda esperar hasta las primeras 12 semanas de gestación antes de comenzar cualquier tratamiento.
Durante el embarazo, es importante evitar los ácidos, excepto el ácido hialurónico. Además, no se debe utilizar vitamina C en concentraciones superiores al 7%, ni aceites esenciales a excepción de lavanda, árbol de té o rosa mosqueta. También es aconsejable evitar algunos principios activos sobre los que te informaremos.
Durante el embarazo, se recomienda utilizar productos hidratantes y nutritivos. Es especialmente importante el uso de protección solar, ya que la producción de melanina tiende a aumentar.
En general, muchas mujeres experimentan mejoras en la piel, uñas y cabello debido a las hormonas. Sin embargo, pueden surgir síntomas como acné temporal, manchas debido al aumento de melanina, acumulación de grasa para nutrir al bebé durante la lactancia, retención de líquidos y mayor sensibilidad.
